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Futuro de Proyecto Aula

Hola a todos. Habrán notado una enorme lentitud en la web de Proyecto Aula que empeora cuantos más usuarios simultáneos hay. Pues bien, el problema se está agravando: las visitas son cada vez más numerosas (ayer por ejemplo hubo 4.300 visitantes únicos), cada vez se consume más tráfico (1 Gb al día aproximadamente) y cada vez la base de datos crece más (18 megas actualmente).
Estoy a punto de "morir de éxito". Si siguen llegando visitas a este ritmo el servidor que comparto va a caerse y no puedo optar a un servidor dedicado que, por otro lado, no puedo financiar (cuesta un dineral).
Las soluciones no son fáciles. Se me ocurren las siguientes:

• Seguir así sabiendo que la lentitud va a ser una constante. Si sigo poniendo documentos a la larga tendré que cerrar.
• Buscar patrocinadores privados.
  
• Crear una asociación y financiar la web con las aportaciones de los socios.
• Recurrir a donaciones privadas.

Lo que tengo claro es que la web o sigue GRATIS o se cierra. En fin, agradezco sugerencias. Me gustaría que opinaran en este blog para que quedara constancia pública.

La evaluación ha cambiado.

A veces, por no decir siempre, se acusa al profesor de Lengua de ser sumamente subjetivo en sus evaluaciones del alumnado, al menos por parte del alumnado (quiero pensar que no es así por parte de los otros compañeros), y la realidad me indica que en gran medida es así. Cierto que somos objetivos cuando se trata de evaluar un examen de sintaxis o uno de morfología. Pero, ¿qué pasa cuando lo que tenemos que evaluar es una exposición oral o un cuento elaborado por los alumnos?. Les presento hoy una herramienta que nos va a ayudar en la evaluación de aquellos aspectos educativos que hasta ahora permanecían un tanto "desatendidos". Se trata de una página web que, aunque originalmente se diseñó en inglés, podemos encontrar en español. Podéis encontrarla aquí. Aunque en un principio pueda parecer un poco enrevesada animo a utilizarla porque nos va a permitir, a través de un serie de formularios totalmente editables, evaluar desde la elaboración de un cuento hasta una exposición oral pasando por un texto persuasivo.
No se trata de una evaluación demagógica que nos obligue a hacerlo de una determinada manera. En mi opinión su utilidad radica en dos elementos:

• Nos orienta en torno a los elementos que hemos de evaluar y nos propone procesos de evaluación.
• Permite al alumnado, con anterioridad a la elaboración de su trabajo, saber qué vamos a evaluar y cómo. Este aspecto, como queda claro si alguna vez han utilizado las webquest, es fundamental para lograr avances en el proceso de aprendizaje del alumnado.

Prueben a llevar una al aula y hacer que el grupo entero sea el que evalúe. Los resultados serán más objetivos y, lo que es más sorprendente, a menudo la evaluación del grupo de alumnos va a ser más severa que la del profesor. ¿Paradoja?
Si lo llevan al aula, por favor, incluyan aquí sus opiniones.

Wikipedia como contenido estándar

Después de tanto tiempo poniendo contenidos de lengua en la red para su uso compartido me surgen algunas dudas que intento pormenorizar:

• Por regla general los materiales, al menos los teóricos, utilizan distintos niveles y distinta terminología, lo que implica que, posteriormente, los ejercicios que se adjunten no puedan seguir un esquema común y pierdan parte de su funcionalidad en el aula al incluir términos que no se han utilizado en clase o que no se han trabajado suficientemente.
• Los libros de texto caen en este mismo error, al menos en lo referido a los niveles. No se tratan los mismos contenidos en los mismos cursos. Este es un problema añadido cuando nos encontramos con alumnos que se incorporan de otros centros.
  

Como consecuencia de esta realidad se hace difícil homogeneizar contenidos tanto teóricos como prácticos para llevarlos al aula y el directamente perjudicado es el alumno. Es por ello que me planteo, y pongo aquí para su debate, la posibilidad de utilizar como documentos teóricos de referencia los que podemos encontrar en la Wikipedia. Si consensuamos los documentos teóricos en torno a estos materiales, la elaboración de ejercicios se convierte en algo mucho más fácil y útil.

La ventaja principal que le veo a la wikipedia es que, al contrario que los documentos más normativos (RAE) se caracteriza por la claridad de la exposición.

Pongamos un ejemplo, la sustantivación. Puedes consultar el documento de la wikipedia aquí. Lo que planteo es publicar este contenido en la web (sobre todo para que permanezca estable y no sufra posteriores ediciones que distorsionen nuestro trabajo) y a partir de este documento añadir ejercicios (tanto para imprimir como interactivos) que puedan ser llevados al aula. De esta forma si alguien añade nuevos ejercicios complementarios para sus alumnos puede compartirlos de forma que todos los demás podamos utilizarlos sin tener que editarlos y adaptarlos.

Lo que planteo para el debate es lo siguiente:

• Pongámonos de acuerdo en los contenidos teóricos y utilicemos para ello los que ya están a disposición de todos en la wikipedia.
• Elaboremos ejercicios que se adapten a estos documentos teóricos teniendo en cuenta que nuestro trabajo ha de ser colaborativo y ha de poder compartirse. Con este sistema de trabajo todos podríamos beneficiarnos dado que ante un problema práctico (un alumno no distingue elementos sustantivados) podríamos ofrecerle un montón de material complementario para que pudiera superar su carencia.

En fin, espero opiniones y que esto sirva para el debate.

Las webquest como herramienta educativa

Las webquest se han constituido desde su nacimiento hace algunos años en una herramienta educativa de primer orden. Ciertamente así es y en mi opinión contribuyen a que el profesorado del área le pierda el miedo al aula de informática dado que las tareas que han de realizar los alumnos están perfectamente marcadas. Si este "orden" lo combinamos con herramientas como Netsupport podemos acudir al aula de informática con total tranquilidad sabiendo que vamos a sacarle rendimiento a las TIC.
En mi opinión es una herramienta que debemos potenciar porque cumple varios requisitos fundamentales:

1. Es una herramienta colaborativa. Siempre se pide que al menos sean dos alumnos los que la realizan.
2. Permite el trabajo interdisciplinar. Aunque es cierto que esto puede conllevar algunas adaptaciones de horarios en los centros, nada nos impide combinar en una webquest objetivos de Historia, Ciencias y Literatura.
3. El alumnado ha de reelaborar los documentos que encuentra. Lógicamente si nosotros sabemos de dónde toma sus datos ha de reelaborarlos de forma casi obligatoria. Conseguimos que no recurra a portales especializados en apuntes.
4. Permite al alumnado adquirir conocimientos e integrarlos.
5. Se orienta al trabajo en grupo.
6. No requiere grandes conocimientos informáticos por parte del profesorado, (siempre podemos pedirles que nos la entreguen por escrito)

En fin son tantas las ventajas que recomiendo vivamente su uso. Bien es verdad que desde hace un tiempo veo webquest que no cumplen ciertos requisitos de calidad. Por ello animo a consultar estos documentos que podéis encontrar aquí y que pueden ayudar a la hora de diseñar una buena webquest.
Podéis encontrar ejemplos que considero muy buenos de webquest aquí.

Ya no necesitas ordenador

Quiero presentaros una herramienta que puede tener su aplicación en la medida en que puede ayudarnos a integrar las nuevas tecnologías en nuestro oficio.

Hasta ahora tenías dos opciones si querías trabajar con el ordenador en distintos lugares: una era llevarte tus documentos en un disco duro externo o en una pastilla de memoria (antes pendrive); la otra era cargar con esos instrumentos mal llamados portátiles, ¡cómo llegan a pesar!.

En realidad existe otra posibilidad, la PDA, que yo nunca he sido capaz de utilizar porque tengo la sensación de que a base de picotear en la pantalla con el lápiz me convierto en un pollo tomatero. Además las pda, hay que decirlo, pierden la información cuando se te agota la batería. ¡Créanme que es cierto!. Yo ya lo he padecido dos veces.
Pues bien, y este es el motivo de este artículo, a veces pensaba por qué no se podían ejecutar los programas que habitualmente utilizo en cualquier ordenador de forma que yo con mi disco duro pudiera conectarme a una máquina con Windows y trabajar en ella.
El problema está casi totalmente resuelto. Existe una página www.portableapps.com que nos ofrece la posibilidad de descargar versiones livianas de programas para comprimir, navegar, enviar correo, crear un word, editar un audio, generar una web y muchas otras cosas que hasta ahora no eran posibles. Y todo ello el menos de 90 megas. Recomiendo fervientemente su utilización. En concreto pongo dos ejemplos de uso que les sonarán familiares.
El primero me sucedió hace poco al intentar descomprimir un archivo en un ordenador que no tenía winzip. Tuve que conectarme a internet, buscar una versión gratuita, instalar el programa (no tenía permisos de administrador), desesperarme por no poder instalar y largarme despotricando. Si hubiera tenido estos programas lo habría hecho desde la pastilla de memoria (antes pendrive).
El segundo caso es también cercano. Me envían un documento hecho en Extremadura y, por tanto, hecho en OpenOffice. Como yo trabajo en güindos (antes windows) no pude leerlo porque no encontré conversores después de varios intentos. Hoy lo podría haber hecho sin tener que instalar nada en mi ordenador.
Como veréis puede ahorrarnos tiempo y problemas. Además, y como valor añadido, no deja huellas en el ordenador que utilicemos. No sé si saben que todo lo que hacen en un ordenador ajeno queda registrado y no es muy difícil adivinar por dónde estuviste. A mí no me apetece ir dejando huellas por ahí. Si utilizáis en ordenadores ajenos esta aplicación no quedará constancia de su uso, lo que, en determinadas ocasiones, puede ser muy útil.
No sé qué habrán pensado hasta aquí pero con determinadas ocasiones me estaba refiriendo a las páginas del banco ;-)
Bueno, esto es todo. Les recomiendo utilizar estas aplicaciones para trabajar en los centros sólo con su pendrive.

Corpus del español

¿Te imaginas poder consultar en una base de datos de 100 millones de palabras para averiguar cómo se usa una palabra determinada en, por ejemplo, el siglo XVI?
¿Imaginas que los resultados te salgan en contexto citando además la obra de la que proceden?
Pues bien, esto es posible. La Universidad de Brigham Young, por supuesto en Estados Unidos, y el profesor Mark Davies, al que desde aquí felicitamos, lo han conseguido.
Podemos plantearnos que la utilidad es muy limitada en la enseñanza secundaria pero no es así. En mi opinión, cuando la literatura está en franco retroceso debemos recuperar herramientas y recursos que muestren al alumnado otra forma de ver la lengua y, por extensión, la literatura.
Indudablemente podemos encontrarle aplicaciones educativas en Bachillerato y ¿por qué no? en webquest que utilicen este recurso.
Pues ya sabes, si quieres ver esta maravilla, visita este enlace desde aquí o pulsando sobre la imagen del mundo.